Diario de un operador de lineas calientes INTRODUCCION

Introduccion

Debo de reconocer que hago dinero gracias al sexo. Gracias a una cantidad considerable de calientes fracasados es que puedo pagar mi renta y vicios mundanos. Me lleno los bolsillos gracias a los frustrados sexuales. No me prostituyo, bueno, al menos no mi cuerpo, en el trabajo no uso mis genitales ni ninguno de mis orificios, uso la voz para vender ilusiones y esperanzas a una bola de discapacitados mentales, incapaces de relacionarse con los miembros de su misma especie. Vendo fantasías auditivas.
El mecanismo es muy sencillo, el neandertal ve la televisión que hace las veces de acompañante fiel, salmo y predicador, maestro en estos tiempos de desfase nuclear; a veces la tele también hace de padres educando a los hijos en la patraña comercial condicionándolos. En medio de esa maraña, generalmente por la noche pasan los anuncios comerciales de la compañía para la que trabajo.
En la televisión pasan un anuncio de una chica hiper buena, una modelo excelentemente maquillada, vestida sugestivamente, ataviada con un encajito que deja adivinar unas tetas que jamás chuparán ninguno de los televidentes, ni mucho menos los individuos que usan las líneas donde trabajo. Las chicas de estos comerciales tienen un teléfono de forma fálica en la mano, lo toman suavemente mientras ríen fascinadas como si del otro lado estuviera un picarón, mezcla de Don Juan con Cyrano que le cuenta palabras de miel entre románticas y eróticas. La chica dice, ¿para que salir? (afuera hay mucho pervertido, mejor escucho a los pervertidos por teléfono) si aquí me hablan bonito y me divierto como enana y sonríe pícaramente sugiriendo que se va a masturbar muy fuerte metiéndose hasta el pepino mientras el tipo le habla cosas sucias.
También hay otras tramas más elaboradas en los anuncios, por ejemplo, la de los románticos que encuentran la felicidad eterna en las líneas calientes. En este comercial sale una parejita con swetercitos inmaculados y peinados impecables, una de las típicas parejas de una familia feliz y funcional (de las que ya no existen). Hacen creer a los neandertales que su vida puede mejorar y se podrían convertir en seres normales, (a pesar de estar gordos, grasientos, de vivir 8 horas pegados a un sofá lleno de migajas de frituras) les hacen creen que pueden pertenecer a la clase burguesa que va en extinción, que su vida se puede convertir en un final feliz de telenovela venezolana. Patético. Pobres ilusos.
También hay otro comercial más sexual en donde tres chicas buenérrimas están riendo a pierna suelta mientras juguetean en bikini con el auricular. Del otro lado, tres tipos se miran cómplicemente como diciendo “estas perras ya cayeron, vamos a hacer una orgía mítica” Las rubias chichonas traman también entre ellas como anticipando la aventura de la noche. CUT TO: INT NIGHT las chicas con escotes reveladores tocan la puerta y los chicos les abren con cara de estúpidos sintiéndose guaperas, uno le hace una mueca a los otros como diciendo “te dije que iban a estar bien buenas, la línea caliente nunca falla” mientras las chicas los miran listas para meterse en el jacuzzi en pelotas.
También hay líneas gays en donde sale puro musculoso que dan la imagen de ternura. O sea, como diciendo que te la meterán duro y después te acariciarán con cariño. Last but not least, las líneas psíquicas en donde está gente busca respuestas a los problemas de su vida diaria. La gente histérica llama esperando un milagro que ponga fin a los problemas generados por su estupidez e ignorancia y consulta como puede salir de la bancarrota cuando está cargando 300 dólares mensuales en su cuenta telefónica para hablar con los videntes. Pobre del ser humano.



Oswaldo Perez Cabrera